El FPV (First Person View) es una experiencia inmersiva que permite al piloto controlar un modelo a distancia mediante una cámara y gafas que transmiten en tiempo real, simulando estar dentro del drone. Surgió en 2006 para experimentar en tiempo real bajo condiciones específicas y perfeccionar la destreza del piloto. Ha sido aplicado en sectores como el cinematográfico, destacando paisajes y escenas llenas de adrenalina, así como en emergencias, facilitando la visibilidad de áreas afectadas y el diseño de rutas de atención. Además, ha sido clave para explorar espacios remotos inaccesibles para los humanos. En nuestros países, esta tecnología avanza con fuerza, ayudando a reducir brechas sociales y tecnológicas. Un uso destacado son las carreras de drones, donde los pilotos compiten en recorridos con obstáculos, demostrando habilidad, reacción y espíritu competitivo.